viernes, 29 de marzo de 2013

SÁBADO SANTO


Sábado Santo

"Jesús yace en su tumba y los apóstoles creen que todo se acabó. Todo el día sábado su cuerpo descansa en el sepulcro Pero su madre, María, se acuerda de lo que dijo su hijo : "Al tercer día resucitaré". Los Apóstoles van llegando a su lado, y Ella les consuela. "
"El Sábado santo es un día de luto inmenso, de silencio y de espera vigilante de la Resurrección. La Iglesia en particular recuerda el dolor, la valentía y la esperanza de la Virgen María. "  
Sábado SantoElla representa la angustia de una Madre que tiene entre sus brazos a su Hijo muerto, pero no se puede olvidar en este momento ella es la única que conserva en su corazón las palabras del anciano Simeón, que si bien él profetizó que Cristo sería signo de contradicción y una espada le traspasaría el alma, también indicó que Jesús sería signo de resurrección.
Lo que los discípulos habían olvidado, María lo conservaba en el corazón: la profecía de la resurrección al tercer día. Y María esperó hasta el tercer día
Generalmente en las mañanas se realizan retiros de reflexión en torno a este tema, y la tarde resulta ser más bien de tranquilidad, oración y de espera al Jesús Resucitado
Ésta se divide en cuatro partes:
- Breve Lucernario: Se bendice el fuego. Se prepara el cirio en el cual el sacerdote con un punzón traza una cruz. Luego marca en la parte superior la letra Alfa y en la inferior omega, entre los brazos de la cruz marca las cifras del año en curso. A continuación se anuncia el Pregón Pascual.
- Liturgia de la Palabra: En ella la Iglesia confiada en la Palabra y la promesa del Señor, recuerda las maravillas que desde los comienzos realizó Dios con su pueblo.
- Liturgia Bautismal: Se hace la renovación de los compromisos bautismales y en muchas ocasiones se realiza el bautismo de un feligrés.
- Liturgia de la Eucaristía: Se celebra la Santa Misa, aunque se realice antes de la media noche, es la Misa Pascual del Domingo de Resurrección. El sacerdote y los ministros se revisten de blanco y con alegría se anuncia la Resurrección del Hijo de Dios.

1 comentario:

  1. El Sábado Santo es un día de luto. En la Iglesia Católica también se conmemora la Soledad de María después de llevar al sepulcro a Cristo, quedando en compañía del Apóstol Juan. Pueden ser expuestas en la Iglesia, a la veneración de los fieles, la imagen de Cristo crucificado, o en el sepulcro, o descendiendo a los Infiernos, ya que ilustran el misterio del Sábado Santo. Hoy la Iglesia se abstiene absolutamente del sacrificio de la Misa. La Sagrada Comunión puede darse solamente como viático. No se conceda celebrar el Matrimonio, ni administrar otros sacramentos, a excepción de la Penitencia y la Unción de los Enfermos.

    Hasta la reforma litúrgica de la Semana Santa acometida por el Papa Pío XII (encargada en 1955 a Monseñor Aníbal Bugnini como una especie de anticipo a la reforma litúrgica general del Concilio Vaticano II) se llamaba a este día Sábado de Gloria, pues la celebración de la Resurrección (la Vigilia Pascual) tenía lugar ya en la mañana del sábado, debido a la norma del ayuno preparatorio a la Comunión sacramental desde la medianoche precedente. Considerando que el Viernes Santo ya había sido día de ayuno, era excesivo prolongarlo un día más casi completo. En 1951 Pío XII permitió, mediante el inesperado decreto “Dominicae Resurrectionis” de 9 de febrero (Vid. AAS 43 (1951), pp. 128-129), que la vigilia se realizase de noche, lo que tras otro decreto, el “Maxima Redemptionis” de 16 de noviembre de 1955 (Vid. AAS 47 (1955), pp. 838-841), fue obligatorio a partir de 1956. Desde entonces dicha Vigilia se celebra más razonablemente en horas de la noche, el Sábado Santo queda para los católicos más como un día de espera, expectante por la gran celebración que tendrá lugar unas horas más tarde. Esto se vio facilitado también por la reforma al ayuno preparatorio a tres horas antes de comulgar. El Concilio Vaticano II actualmente lo tiene fijado en una hora antes de comulgar.

    Aunque en muchos lugares sigue denominándose así por la costumbre, su uso es incorrecto. No obstante, dado el statu quo entre las iglesias cristianas respecto a las celebraciones litúrgicas en la Basílica del Santo Sepulcro de Jerusalén, como a la Iglesia Católica Apostólica y Romana le corresponden las horas de la mañana para sus oficios, la Vigilia Pascual sigue realizándose el sábado por la mañana en dicho lugar.

    Como no puede celebrarse ningún rito oficial durante el día, se suelen predicar retiros espirituales, y en muchos lugares también los sacerdotes durante el día atienden confesiones. También es costumbre en algunos templos el rezo de la Liturgia de las Horas por parte de los clérigos con participación de fieles seglares.

    Un beso A TODOS.

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