Nos han demostrado como la Virgen nos ayuda a reconstruir el mundo, ese mundo que nosotros, las personas, nos empeñamos muchas veces en destruir.
Con nuestras envidias, nuestros celos, nuestra poca generosidad, nuestras críticas, en definitiva, con todo aquello que hace daño.
A partir de ahora debemos procurar "construir " nuestro mundo con todo lo bueno que seamos capaces de hacer...y como no, con nuestras oraciones.
Me encantó este día.
ResponderEliminarMuchos besos!
Ángela.