La Conmemoración de los Fieles Difuntos, popularmente llamada Día de Muertos o Día de Difuntos, es una celebración que tiene lugar el día 2 de noviembre, cuyo objetivo es orar por aquellos fieles que han acabado su vida terrenal y, especialmente, por aquellos que se encuentran aún en estado de purificación en el Purgatorio.
Abriendo las páginas de nuestro pasado podemos encontrar que esta celebración es de origen prehispánico y posteriormente con la llegada de los españoles se combinó con la celebración católica de Todos los Santos y Fieles Difuntos el 1 y 2 de noviembre respectivamente, hasta derivar en una de las tradiciones más ricas y con más arraigo en México.
Tan hermosa resulta esta festividad que en 2003 la UNESCO declaró al Día de Muertos como Patrimonio de la Humanidad.
Gracias Quili por tu información.
ResponderEliminarbesos
Como rezamos en las oraciones de la Misa: para el que cree en Dios, la vida no termina, apenas se transforma. El día de los difuntos nos recuerda que todos caminamos hacia el cielo, donde nos encontraremos con aquellos que ya partieron antes, y con quienes viviremos para siempre en alegría y paz. Nuestro Dios es el Dios de la vida y la vida en abundancia, y eso es sencillamente genial. Un abrazo.
ResponderEliminarEn México esta fiesta debe de ser preciosa.
ResponderEliminarMuchos besos!
Ángela.